Estalla coche bomba en Tula, Hidalgo Un Comandante muere

Un coche bomba estalló ayer en Tula, Hidalgo, lo que mató a un comandante policiaco e hirió a tres agentes. El atentado fue inicialmente atribuido a Los Zetas por la Secretaría de Seguridad Pública estatal. Es el primero con estas características que ocurre en el centro del país. El estallido se registró en la mañana. Un grupo de policías fue atraído a la comunidad de El Carmen mediante una llamada telefónica, en la que se aseguró que se encontraba un cadáver en el coche que contenía los explosivos. Cuando revisaban el automóvil Bora se perpetró el ataque. El comandante de la Coordinación de Investigación en la región de Tula, Víctor Peña, murió minutos después, y los tres agentes que lo acompañaban resultaron heridos. El procurador de Justicia hidalguense, José Alberto Rodríguez Calderón, anunció que “tiene que generarse una alerta y reforzar la seguridad en el estado”. El 17 de noviembre pasado, en ese mismo municipio, dos presuntos integrantes de Los Zetas, supuestamente dedicados a extorsionar a comerciantes de la región, fueron ultimados por agentes de la Coordinación de Seguridad Estatal. Las autoridades descartaron confirmar un vínculo entre ambos hechos. La PGR, en tanto, ya informó que colaborará con las investigaciones. Muere mando al estallar un coche bomba en Tula Un saldo de un policía muerto y tres más heridos dejó el estallamiento de un coche bomba en un ataque acaecido en la región de Tula, Hidalgo, el cual fue atribuido por las autoridades a la delincuencia organizada. El atentado violento esinédito en la zona centro del país; además se atrajo a los agentes mediante una denuncia de un supuesto plagio. La explosión se registró la mañana de este sábado, cuando agentes de seguridad pública estatal destacamentados en Tula patrullaban las inmediaciones de la comunidad El Carmen, rumbo a Tepeji del Río, ante la llamada anónima de que había un vehículo abandonado con una persona maniatada en su interior. Al lugar se trasladó el comandante de la Coordinación de Investigación en la región de Tula, Víctor Peña, así como tres agentes más, para confirmar la autenticidad del reporte, expuso el secretario de Seguridad Pública estatal, Damián Canales Mena. En el lugar fue confirmada la presencia de un vehículo Bora blanco, con placas de circulación del Distrito Federal. Al estarlo revisando, éste explotó y segó de la vida del comandante y dejo heridos a sus tres acompañantes. Los hechos se dan luego de que el 17 de noviembre pasado en ese mismo municipio, dos presuntos integrantes de Los Zetas —supuestamente dedicados a extorsionar a comerciantes de la región— fueran ultimados por agentes de la Coordinación de Seguridad Estatal. Las víctimas fueron identificadas como Ramón Humberto Ovalle Cárdenas, de 40 años, presuntamente originario de Tamaulipas, y Humberto Pérez Orduña, de 21 años, quien vivía en Pachuca, lugar de donde es originario Heriberto Lazcano Lazcano, líder de Los Zetas. Cuestionado sobre si estos hechos pudieran tener relación, luego de que confirmó que el comandante muerto había participado en esa balacera con los presuntos zetas, el funcionario estatal dijo que no se trata de una coincidencia. "Efectivamente, el comandante Víctor Peña y otro elemento enfrentaron en el centro de Tula hace unas cinco o seis semanas a dos integrantes de Los Zetas, y en el enfrentamiento dos delincuentes perdieron la vida." "Este hecho presumiblemente se atribuye a Los Zetas, pero estamos investigando, porque comprenderán que ha transcurrido muy poco tiempo", dijo. Sobre el tipo de explosivos utilizados, Canales Mena aseveró que eso le corresponde a los peritos. "No puedo decir si se trató de un coche bomba, eso lo determinará los servicios periciales, porque si me atreviera a hacer un pronunciamiento, actuaría con irresponsabilidad". El secretario de Seguridad estatal negó que luego de los hechos se tuvieran que someter a revisión los manuales de procedimientos de las autoridades policiales. "Quisiera comentar que no podemos afirmar que se tengan que revisar los manuales de procedimiento; sería como señalar que no se actuó adecuadamente, cuando el comandante trató de dar lo mejor de sí. "Era hombre de resultados, muy comprometido, soy el primero en lamentar la pérdida de su vida, era un excelente comandante". Por los hechos, se inició la averiguación previa 12/DAP /023/2011. Perfilan venganza por muerte de zetas El pasado 17 de noviembre, dos presuntos integrantes de Los Zetas fueron muertos en una balacera con agentes de la Coordinación de Investigación en el municipio de Tula. Los hecho se registraron sobre la calle Heroico Colegio Militar, a la altura de las oficinas de Telecom, cuando los agentes pretendían inspeccionar una camioneta Honda tipo RAV 4, con placas del Distrito Federal, porque se había denunciado que en ella viajaban personas que se dedicaban a extorsionar a comerciantes de la región. Al acercarse a la unidad, uno de los ocupantes sacó un rifle R-15 y disparó a los uniformados, quienes repelieron el ataque. Las personas muertas fueron identificadas como Humberto Pérez Orduña, de 21 años y Ramón Humberto Ovalle Cárdenas, de 40 años, quien traía consigo una credencial de elector con domicilio en Río Bravo, Tamaulipas. Se aseguraron ese día un rifle AK-47, otro fusil de asalto AR-15; una pistola escuadra calibre 9 milímetros; cuatro granadas cartuchos de diversos calibres, así como varios teléfonos celulares. También se aseguró una camioneta Dodge tipo Nitro, con placas de circulación del Distrito Federal que, al igual que la RAV4, tienen reporte de robo. En un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública estatal se presumió que estas personas pertenecían a Los Zetas por el modus operandi y las armas aseguradas. Se inició la averiguación previa 12/DAP/530/2010. En esa balacera participó el comandante abatido ayer en Tula, Víctor Peña. Reconocen amenazas Momentos antes de que estallara el coche-bomba, sobre el vehículo fue reportado un presunto mensaje en el que se amenazaba de manera directa a jefes policiacos de la entidad. El hecho fue confirmado por el secretario de Seguridad estatal, Damián Canales Mena, quien dijo que "había un mensaje, desde luego intimidatorio para los principales mandos policiacos de la Secretaría". Dijo que "es probable que este mensaje haya quedado destruido junto con el vehículo". El funcionario refirió: "no sé si sea una declaratoria de guerra o no" del crimen organizado, pero lo que ocupa a las autoridades es salvaguardar la integridad de la población "La seguridad pública está garantizada, el gobierno del estado renueva su compromiso con los hidalguenses", dijo. Hidalgo está en "alerta" El procurador de Justicia de Hidalgo, José Alberto Rodríguez Calderón, reconoció que se mantiene una alerta general en la entidad, la que calificó de "una alerta normal" luego de los hechos ocurridos en Tula. "No sabemos si sea un hecho aislado o se desencadene algo más. Debemos estar muy atentos a cualquier situación; tiene que generarse una alerta y reforzarse la seguridad en el estado." Acerca de si se hay amenazas contra mandos de la Procuraduría, dijo que "no hemos recibido ninguna amenaza directa." "Estamos hablando de que hubo de por medio explosivos, hay utilización de explosivos en este hecho. Hay una ley federal de explosivos y armas de fuego, razón por la cual la PGR inició ya una averiguación previa", dijo sobre el coche bomba. Del estado de salud de los oficiales heridos, informó que fueron atendidos en el hospital regional de Tula y dados de alta con lesiones leves. "Sólo un policía tiene lesiones más graves y fue trasladado a Pachuca". Sobre los lugares en que se habrían encontrado más amenazas contra la seguridad del estado, aclaró que "no hay información en ese sentido, no se ubicaron más mantas de ningún tipo".

2011-01-24T18:01:12+00:00
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